Miembros de la oposición interna dijeron este lunes que intensificará sus reclamos para la liberación de presos políticos, pese a la advertencia del general Raúl Castro de que no cederá a lo que calificó de "chantaje", informó la AFP.
"No me tomó por sorpresa esta actitud intransigente de Raúl" porque "siempre hemos dicho que el gobierno cubano ha demostrado históricamente que actúa de manera irracional", dijo el disidente Guillermo Fariñas, en huelga de hambre desde hace más de 40 días e ingresado en el hospital provincial de Santa Clara.
El opositor, que exige la liberación de 26 presos políticos enfermos, dijo haber asumido como "un reto" la advertencia de Raúl Castro.
"Ahora más que nunca es que hay que continuar la huelga de hambre, y le aceptamos el reto y vamos a morir con toda la dignidad", añadió, al denunciar la "crueldad y falta de humanismo del régimen" cubano.
El domingo en la clausura del IX Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), Raúl Castro acusó a Washington y Europa de desencadenar "una descomunal campaña de descrédito" y de manipular "con cinismo y desfachatez" la muerte del preso político Orlando Zapata, el pasado 23 de febrero, tras una huelga de hambre de 86 días.
"No cederemos jamás al chantaje, de ningún país o conjunto de naciones por poderosas que sean, pase lo que pase", dijo Raúl Castro, de 78 años, al referirse al caso de Fariñas.
La madre de Fariñas, Alicia Hernández, una enfermera retirada de 75 años, advirtió que su hijo "está mal" y que "en cualquier momento cae en estado de coma".
"La única opinión que yo puedo dar en este momento (sobre lo dicho por Raúl Castro) es que recuerde que él tiene hijos", declaró la mujer a la AFP.
Las Damas de Blanco, madres, esposas y familiares de presos políticos, consideraron que la reacción del gobierno "era de esperar".
"Se siente acorralado", dijo Berta Soler, esposa del disidente Ángel Moya, condenado a 20 años de prisión en 2003.
"No es un chantaje ni estamos presionando a nadie. Estamos haciendo cosas para que sean un poco más comprensivos y humanos" y "vamos a seguir protestando pacíficamente hasta que liberen a nuestros presos", declaró Soler.
Para Elizardo Sánchez, quien encabeza la Comisión Cubana de Derechos humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), la posición del gobierno "es una forma completamente irresponsable y mezquina de actuar".
"Es obvio que siguen defendiendo la forma totalitaria de gobierno (…) sin aceptar la necesidad de reformas jurídicas, económicas y políticas", manifestó.
Según la CCDHRN, en la Isla existen unos 200 presos políticos, a los que el gobierno tilda de "mercenarios" de Washington.
(DDC)
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