En la calle se recibe con cierta esperanza la sorpresiva propuesta de Raúl Castro, pero se quiere elegir directamente a los gobernantes.

Disidentes y exiliados restaron importancia al anuncio de Raúl Castro sobre la futura limitación de mandatos de los altos cargos estatales al considerar que llega tarde y no resuelve el problema principal del país. "Es interesante, pero tardío. Lo mejor sería que tuviera carácter retroactivo y que ellos dieran por terminado su mandato ahora mismo", afirmó Manuel Cuesta Morúa, líder del Partido Arco Progresista. El socialdemócrata atribuyó la decisión de Raúl Castro, anunciada en la inauguración del VI Congreso del Partido Comunista, al intento del régimen por "parecer moderno en el ejercicio del poder, a tono con los acontecimientos del mundo". Sin embargo, lo que el país necesita "no es un simple cambio de mando, sino un nuevo proyecto de nación", apreció en declaraciones a DIARIO DE CUBA. "Hemos arribado a la conclusión de que resulta aconsejable limitar a un máximo de dos períodos de cinco años el desempeño de los cargos políticos fundamentales", señaló Raúl Castro el sábado. Él y su hermano han gobernado ininterrumpidamente desde 1959. "Hoy afrontamos las consecuencias de no contar con una reserva de sustitutos preparados", advirtió el general. En Miami, Omar López Montenegro, directivo de la Fundación Nacional Cubano Americana, afirmó que la propuesta indica que "sigue la politica de cambios de forma pero no de fondo". "El problema de la duración de cargos estatales se soluciona por sí solo con la alternancia democrática", apuntó López en declaraciones a este periódico. En España, el exilio tampoco dio mucho crédito al anuncio. Los mandatarios cubanos "saben que no van a vivir más de 10 años, saben que su etapa se termina", declaró a la AFP el secretario general de la Federación de Organizaciones Cubanas en España, Ernesto Gutiérrez. Raúl Castro "va a cumplir 80 años y sabe que le pueden quedar, a lo sumo y gozando de buena salud, 10 años más", estimó el disidente. Gutiérrez también dijo que las medidas económicas anunciadas, para salvar al país de la quiebra económica, resultan simplemente "paliativas", y lamentó la ausencia de iniciativas prodemocráticas. "Son reformas estrictamente para intentar ganar tiempo y ganar de alguna manera algo de credibilidad internacional, sobre todo en materia financiera y económica", agregó el exiliado. Elizardo Sánchez: 'Otros diez años bajo las mismas reglas de gobierno' Algunos ciudadanos recibieron con esperanza la sorpresiva propuesta de Raúl Castro de limitar el tiempo de los funcionarios en los cargos de poder, informó Reuters. "No pensaba oír eso, es genial que también en política podamos parecernos al mundo. Nada es perfecto pero parece que Raúl (Castro) quiere modernizar de verdad el país, es una esperanza", dijo el domingo Laritza Martínez, una estudiante de 21 años, que hacía fila para tomar un bus hacia la playa. El gobernante, que asumió las riendas de la Isla en 2008 cuando su hermano Fidel Castro cedió su puesto por cuestiones de salud, dijo que era necesario renovar la dirigencia. Reconoció que era vergonzoso que no hubieran podido solucionar este problema en medio siglo y que aunque la cúpula había intentado promover a jóvenes a posiciones importantes, no siempre eligieron a las personas correctas. Pero en ningún momento habló ni sugirió la posibilidad de elecciones multipartidistas. "En todos los países del mundo los presidentes salen electos una vez (...) y en caso que haya sido muy bueno, que haya hecho muchas cosas buenas, dos veces, hasta diez años", dijo entusiasmada Jannet Santana, médica de 28 años, sobre la propuesta de Castro. "Si sirve, sirve, si no lo sacamos, lo botamos", agregó. La propuesta podría ser sometida a consulta popular y figuraría entre los temas de una conferencia nacional del Partido Comunista que se llevará a cabo en enero de 2012. Pero opositores sostuvieron que deben ser los ciudadanos los que elijan a sus propios gobernantes. "No que ellos mismos busquen sus sucesores, eso lo tiene que decidir el pueblo de Cuba", dijo Bertha Soler, de las Damas de Blanco. Al activista de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez, le parece que con la propuesta de los plazos para limitar mandatos, "la alta nomenclatura se regala a sí misma otros diez años de continuismo totalitario", reportó EFE. "Más que un anuncio es una amenaza: otros diez años bajo las mismas reglas de gobierno" para seguir "arruinando" la economía y "alimentando la desesperanza" del pueblo. En cuanto a los derechos civiles y libertades en la Isla, Sánchez opinó que no cabe esperar nada del Congreso comunista para mejorar la situación en ese ámbito. Por su parte, Laura Pollán, portavoz del grupo Damas de Blanco, resaltó del discurso de Raúl Castro su afirmación de que las calles "son de los revolucionarios", lo que interpreta como dar "bandera abierta a las turbas (de pro-gubernamentales) para agredir" a las personas que salgan a hacer demandas públicas. En declaraciones tras la marcha dominical que las Damas de Blanco realizan en los alrededores de la habanera iglesia de Santa Rita, Pollán indicó que este colectivo seguirá pidiendo la liberación de presos políticos, a pesar de que Castro dio ayer por concluido el proceso de excarcelaciones iniciado el año pasado. Según este grupo femenino, aún quedan en las cárceles unos 60 presos políticos. Diario de Cuba