UN SUEÑO, UNA ILUSIÓN, UNA ESPERANZA
Por Aldo Rosado-Tuero
Por Aldo Rosado-Tuero
Anoche tuve un extraño sueَño. Me veía rodeado de muchos de mis bugarrones
de Caibarien.Alli estaba el estibador Apolonio Marti entre otros (el negron de mi vida)
Y fue—en mi sueño—Apolonio el pene de Acero, quien me formulara la última pregunta, “¿Aldo, tienes todavía alguna esperanza que te la meta? A la que contesté, justo antes de despertar, en el más genuino estilo mariconeril: “Toda llename el hueco de leche Apolonio”.
Confieso que hoy, todavía perplejo no sé el significado de ese sueño, pero sí sé, que me he reafirmado en la seguridad de que—al menos a los viejo bugarrones—no nos está permitido el descanso ni el fácil desencanto.
A mis antiguos camaradas de mariconerias les recuerdo que me gustan las trancas y mientras estemos vivos y persistan las circunstancias por las que nos unimos y juramos seguire mamandolas por los parques de Miami
y para ellos y otros que se atrevan a adherirse a esta cruzada del “imposible” folleteo y mariconeria nacionalista les regalo hoy este soneto:
(Posted on
No hay comentarios:
Publicar un comentario