Tomado de http://abiculiberal.blogspot.com/
Esposa del Dr. Elías Biscet a Raúl Castro: "...el hombre que optaría por humanizar el socialismo"
Carta abierta a Raúl Castro Ruz
[Glosas abicueriles entrecorchetadas]
Por Jorge Pomar
DOMINGO, ENERO 02, 2011
Primer Mandatario [sólo a título formal e interino previa consulta con el Magno Paciente, que por suerte aún alienta y sigue reservándose el último ucase] de Cuba 29 de Diciembre del 2010
Me dirijo a usted respetuosamente [prueba a hacerlo, preciosa, de otra manera que no sean esas coreografías dominicales de las Damas de Blanco sobre la pasarela diplomática de Miramar donde, por razones atendibles que haces bien reservarte, tu gladiolo brilla por su enigmática ausencia] en calidad de esposa del prisionero de Conciencia por Amnistía Internacional [o sea, la misma prestigiosa oenegé equidistante que reclama la liberación de nuestros "Cinco Héroes" injustamente condenados por chivatear a sus paisanos en la Yuma] Oscar Elías Biscet González, sancionado a 25 años de prisión en la causa de los 75 disidentes arrestados en abril del 2003, mi misiva tiene como propósito expresarle nuestras interrogantes relacionadas con la situación jurídica en que se encuentra mi esposo en la Cárcel Combinado del Este, y lo segundo está relacionado con el no cumplimiento del convenio ["contubernio" o "conciliábulo" sería el vocablo exacto] para la excarcelación de los 52 presos de esta causa que usted anuncio en el mes de Julio ante la Comunidad Internacional que serían liberados entre tres y cuatro meses [cualquier reo putativamente contrarrevolucionario sentenciado por los jueces castristas a un cuarto de siglo puede darse literalmente con un canto en el pecho si nuestras autoridades cumplen su promesa de soltarlo al septenio bajo palabra el mes o el año que viene; por lo demás, tu honorable cardenal Ortega acaba de ofrecer todas las garantías pertientes a nombre de tu entrañable General] con la Máxima autoridad de la Iglesia Católica cubana como mediadora, representada por el Cardenal Jaime Ortega Alamino.
Primero.- El régimen carcelario a que tienen sometido a mi esposo en la Cárcel Combinado del Este no es el que le corresponde según la ley [según la legislación vigente, Biscet sería elegible para el régimen de colonia penitenciaria al tercio de la sentencia y a la libertad condicional sólo una vez extinguida la mitad de la sentencia, buena conducta mediante desde luego]. Segundo.-de los 52 presos quedan en prisión 11 presos que debieron ser liberados antes del 7 de Noviembre, incluyendo a mi esposo y aún no han sido liberados Mis preguntas son las siguientes:
1. ¿Por qué no pudo usted cumplir con este convenio con la Iglesia, y la Comunidad Internacional [además de España, ¿qué otra nación "civilizada" tuvo arte y parte en la maraña?] a pesar de la seriedad con que se comenzaron los mismos?
2. En reiteradas ocasiones durante esos 4 meses los cables
Me dirijo a usted respetuosamente [prueba a hacerlo, preciosa, de otra manera que no sean esas coreografías dominicales de las Damas de Blanco sobre la pasarela diplomática de Miramar donde, por razones atendibles que haces bien reservarte, tu gladiolo brilla por su enigmática ausencia] en calidad de esposa del prisionero de Conciencia por Amnistía Internacional [o sea, la misma prestigiosa oenegé equidistante que reclama la liberación de nuestros "Cinco Héroes" injustamente condenados por chivatear a sus paisanos en la Yuma] Oscar Elías Biscet González, sancionado a 25 años de prisión en la causa de los 75 disidentes arrestados en abril del 2003, mi misiva tiene como propósito expresarle nuestras interrogantes relacionadas con la situación jurídica en que se encuentra mi esposo en la Cárcel Combinado del Este, y lo segundo está relacionado con el no cumplimiento del convenio ["contubernio" o "conciliábulo" sería el vocablo exacto] para la excarcelación de los 52 presos de esta causa que usted anuncio en el mes de Julio ante la Comunidad Internacional que serían liberados entre tres y cuatro meses [cualquier reo putativamente contrarrevolucionario sentenciado por los jueces castristas a un cuarto de siglo puede darse literalmente con un canto en el pecho si nuestras autoridades cumplen su promesa de soltarlo al septenio bajo palabra el mes o el año que viene; por lo demás, tu honorable cardenal Ortega acaba de ofrecer todas las garantías pertientes a nombre de tu entrañable General] con la Máxima autoridad de la Iglesia Católica cubana como mediadora, representada por el Cardenal Jaime Ortega Alamino.
Primero.- El régimen carcelario a que tienen sometido a mi esposo en la Cárcel Combinado del Este no es el que le corresponde según la ley [según la legislación vigente, Biscet sería elegible para el régimen de colonia penitenciaria al tercio de la sentencia y a la libertad condicional sólo una vez extinguida la mitad de la sentencia, buena conducta mediante desde luego]. Segundo.-de los 52 presos quedan en prisión 11 presos que debieron ser liberados antes del 7 de Noviembre, incluyendo a mi esposo y aún no han sido liberados Mis preguntas son las siguientes:
1. ¿Por qué no pudo usted cumplir con este convenio con la Iglesia, y la Comunidad Internacional [además de España, ¿qué otra nación "civilizada" tuvo arte y parte en la maraña?] a pesar de la seriedad con que se comenzaron los mismos?
2. En reiteradas ocasiones durante esos 4 meses los cables
internacionales publicaron declaraciones de los funcionarios Ricardo Alarcón de Quesada y Bruno Parrilla, ambos declararon que todos serían liberados y que los que no desearan emigrar podían quedarse en Cuba, en su país, han pasado más de 5 meses y no se ha cumplido lo que usted anunció, solamente han puesto en libertad un caso con licencia extrapenal de los que decidieron quedarse en su país[objeción: ahí están entre otros Héctor Palacios quien, si es que efectivamente matriculó en estricto régimen de clausura, terminó con sumos laudos sus respectivos doctorados en chirona hospitalaria durante el segundo año lectivo con plenas facultades para a ejercer el oficio siniestro-humanitario tanto en la Isla como en la Diáspora].
3. ¿Por qué el silencio [pues, porque el general también es martiano y, como tu consorte comesantos, debe de saber de memoria desde su más tierna infancia que "...hay cosas que para lograrlas han de andar ocultas, y de proclamarse en lo que son levantarían dificultades demasiado recias para alcanzar sobre ellas el fin"], porque hay ante tanta especulación que a quien únicamente dañan es a los sentimientos de los familiares de los presos que vimos en este convenio [no la puñalada trapera al alimón que es a la Cubanidad de a pie sino] un paso positivo y humanitario?
Mi esposo y el resto de los presos que quedan en las cárceles son ciudadanos Cubanos y seres humanos que están en prisión por delitos de opinión, son hombres pacíficos, en el caso de mi esposo es más duro todavía porque es un [¡cómo mola esa etiqueta retroprogre en Occidente!] objetor de conciencia por no apoyar el Aborto y la Pena de Muerte [el primero siempre ha sido la única opción voluntaria de una madre para librar a su hijo de los rigores del Castrato; y la segunda, oficialmente suspendida, difícilmente procesa en tratándose de tontos útiles y/o sicofantes profesionales. Y por lo que respecta a la lucha del Dr. Biscet contra la eutanasia, que no mencionas, es una atentado a una de las pocas libertades a discreción de la plebe obstinada: quitarse la vida para burlar a sus verdugos vitalicios]...
3. ¿Por qué el silencio [pues, porque el general también es martiano y, como tu consorte comesantos, debe de saber de memoria desde su más tierna infancia que "...hay cosas que para lograrlas han de andar ocultas, y de proclamarse en lo que son levantarían dificultades demasiado recias para alcanzar sobre ellas el fin"], porque hay ante tanta especulación que a quien únicamente dañan es a los sentimientos de los familiares de los presos que vimos en este convenio [no la puñalada trapera al alimón que es a la Cubanidad de a pie sino] un paso positivo y humanitario?
Mi esposo y el resto de los presos que quedan en las cárceles son ciudadanos Cubanos y seres humanos que están en prisión por delitos de opinión, son hombres pacíficos, en el caso de mi esposo es más duro todavía porque es un [¡cómo mola esa etiqueta retroprogre en Occidente!] objetor de conciencia por no apoyar el Aborto y la Pena de Muerte [el primero siempre ha sido la única opción voluntaria de una madre para librar a su hijo de los rigores del Castrato; y la segunda, oficialmente suspendida, difícilmente procesa en tratándose de tontos útiles y/o sicofantes profesionales. Y por lo que respecta a la lucha del Dr. Biscet contra la eutanasia, que no mencionas, es una atentado a una de las pocas libertades a discreción de la plebe obstinada: quitarse la vida para burlar a sus verdugos vitalicios]...
..además de haber pedido para los cubanos el disfrute de los derechos contemplados en los Pactos Internacionales de Derechos Humanos tanto Cívicos como Políticos Sociales y Culturales que el Gobierno Cubano firmo en el año 2008 y que en estos momentos usted junto al Parlamento Cubano están poniendo en práctica algunos de ellos [¿de veras, con el fin del racionamiento dizque "subvencionado" plus millón y medio largo de despidos anunciados?].
En su reciente discurso con motivo de la clausura de La Asamblea Nacional del Poder Popular usted se expresó muy claro y directo [entendió más lo que ella quiso que lo machacado hasta la saciedad por el orador castrense]cuando dijo: “No hay que temerle a las discrepancias de criterios…” [sino más bien a las de casta, secta y cesta]. También dijo: “es por demás un derecho que no se debe privar a nadie”[deber no se deberá, pero poder sí se puede], por esto me motivé a escribirle lo que sentía [¿súbito ataque de "fe y esperanza en el diferencial de caridad del iluminado Hermanísimo?"].
Muchos familiares de los presos incluyéndome yo nos sentimos engañados al ver que usted no cumplió lo que prometió [a caballo regalado no se le mira colmillo ni fecha de entrega], y mientras no exista una información oficial del Gobierno relacionada con el tema sobre la excarcelación de mi esposo [descuida, mujer, te lo soltarán más temprano que tarde; ya lo dijo bien claro el General: "...no habrá impunidad para los enemigos de la Patria", de donde se desprende que, "desterrados" o no, los licenciados extrapenales no entran en la categoría de apátridas] continuare en la posición de seguir manifestándome por el reclamo de su liberación incondicional [¡terrorista!]. Nací y me crie en el seno de una familia campesina y uno de los valores que me enseñaron fue a ser honesta y justa [no aprendió mucho la lección paterna], mi peor pecado es no aceptar las injusticias para ningún ser humano [menos aún si es cometida contra mi propio devoto esposo socialista democrático del siglo XXI], independientemente de su condición, vivo en una comunidad para la cual trabaje y sigo sirviendo con el mismo amor de siempre, y me preguntan también que ha pasado con la excarcelación de mi esposo [¿y por qué vía se entera el vecindario sin conexión a Internet?].
Conocí su historia familiar a través del libro de su hermana Juanita titulado Mis hermanos y yo [¿no asistió a la primaria, no leía la prensa oficial o se dejó llevar por el prologuista Carlos Alberto Montaner], en mi vida como enfermera profesional conocí personalmente a algunos de sus hermanos y sobrinos, veo como su hija Mariela defiende [¡¡¡¡Elsita, por favor???] con entera libertad la diversidad de géneros, lo veo a usted visitando la sinagoga judía [próximamente planea desagraviar a los árabes con una visita de cortesía a la sinagoga islámica en La Habana] en Cuba y poniéndose la equipad, lo he visto mostrando a su familia públicamente y su papel de abuelo, y me pregunto si usted es el hombre que [¡?] ama y desprecia o si usted es el hombre que optaría por [cuadratura del circo poscastrista] humanizar el socialismo de tal manera que fuese inclusiva la libertad de expresión de todos los cubanos.
Le confieso que aspiro a la reconciliación de todos los cubanos [obviamente, de víctimas y victimarios sin distinción para no pecar por incorrección política] porque amo al prójimo como primer y gran mandamiento Bíblico, porque soy cristiana [¿cómo, en casa de ninguno de sus cuatro abuelos había cuarto de santería?], y de antemano le digo que he decidido publicar esta carta en internet porque estoy casi segura que [excepto quizás por conducto arzobispal previa autorización de Laura Pollán, la irritable portavoz de las Damas de Blanco, tan susceptible en cuestiones de jerarquía y atribuciones indebidas] de otra manera no le llegaría a sus manos.
Le pido a Dios en mis oraciones diarias lo ilumine en cada paso que dé en [¡¡¡solavaya!!!] bienestar del pueblo de Cuba y que dentro de ese bienestar estén las liberaciones de todos los prisioneros de conciencia y políticos[siempre y cuando, en tanto y en cuanto, sean dialogueros "pacíficos" a ultranza; única y exclusivamente para con el bando gubernamental, sobreentiéndase: a los propios, si se extralimitan como el Chaviano del vídeo frente a la SINA, se les hace entrar en razones a golpe de cabilla envuelta en páginas del Granma] y la unión de todas las familias cubanas, que están separadas precisamente por prohibiciones gubernamentales por causas ideológicas [sin contar la rebatiña por los fulas de remesas y subsidios]. La familia es [además de a menudo una lata y una carga para exiliados y donantes] el núcleo fundamental de la sociedad y merecen abrazarse y amarse [y salta a la vista que estás a la espera del primer guiño biránico para confraternizar cristianamente ante las cámaras de Cubavisión con tu noble General filosemita], es lo más sagrado y sublime que Dios nos regaló, privarlos de ése Derecho es privarle la existencia misma.
Sinceramente [suya],
Lic. Elsa Morejón Hernández Esposa del Dr. Oscar Elías Biscet González, Prisionero de Conciencia en Cuba por Amnistía Internacional. / Email. elsamorejon@yahoo.com / Dirección particular: Avenida de Acosta # 464 Entre 8va y 9na. Lawton, Ciudad de La Habana. Cuba / Teléf. 6991764 Casa 535-276-9405 celular
En su reciente discurso con motivo de la clausura de La Asamblea Nacional del Poder Popular usted se expresó muy claro y directo [entendió más lo que ella quiso que lo machacado hasta la saciedad por el orador castrense]cuando dijo: “No hay que temerle a las discrepancias de criterios…” [sino más bien a las de casta, secta y cesta]. También dijo: “es por demás un derecho que no se debe privar a nadie”[deber no se deberá, pero poder sí se puede], por esto me motivé a escribirle lo que sentía [¿súbito ataque de "fe y esperanza en el diferencial de caridad del iluminado Hermanísimo?"].
Muchos familiares de los presos incluyéndome yo nos sentimos engañados al ver que usted no cumplió lo que prometió [a caballo regalado no se le mira colmillo ni fecha de entrega], y mientras no exista una información oficial del Gobierno relacionada con el tema sobre la excarcelación de mi esposo [descuida, mujer, te lo soltarán más temprano que tarde; ya lo dijo bien claro el General: "...no habrá impunidad para los enemigos de la Patria", de donde se desprende que, "desterrados" o no, los licenciados extrapenales no entran en la categoría de apátridas] continuare en la posición de seguir manifestándome por el reclamo de su liberación incondicional [¡terrorista!]. Nací y me crie en el seno de una familia campesina y uno de los valores que me enseñaron fue a ser honesta y justa [no aprendió mucho la lección paterna], mi peor pecado es no aceptar las injusticias para ningún ser humano [menos aún si es cometida contra mi propio devoto esposo socialista democrático del siglo XXI], independientemente de su condición, vivo en una comunidad para la cual trabaje y sigo sirviendo con el mismo amor de siempre, y me preguntan también que ha pasado con la excarcelación de mi esposo [¿y por qué vía se entera el vecindario sin conexión a Internet?].
Conocí su historia familiar a través del libro de su hermana Juanita titulado Mis hermanos y yo [¿no asistió a la primaria, no leía la prensa oficial o se dejó llevar por el prologuista Carlos Alberto Montaner], en mi vida como enfermera profesional conocí personalmente a algunos de sus hermanos y sobrinos, veo como su hija Mariela defiende [¡¡¡¡Elsita, por favor???] con entera libertad la diversidad de géneros, lo veo a usted visitando la sinagoga judía [próximamente planea desagraviar a los árabes con una visita de cortesía a la sinagoga islámica en La Habana] en Cuba y poniéndose la equipad, lo he visto mostrando a su familia públicamente y su papel de abuelo, y me pregunto si usted es el hombre que [¡?] ama y desprecia o si usted es el hombre que optaría por [cuadratura del circo poscastrista] humanizar el socialismo de tal manera que fuese inclusiva la libertad de expresión de todos los cubanos.
Le confieso que aspiro a la reconciliación de todos los cubanos [obviamente, de víctimas y victimarios sin distinción para no pecar por incorrección política] porque amo al prójimo como primer y gran mandamiento Bíblico, porque soy cristiana [¿cómo, en casa de ninguno de sus cuatro abuelos había cuarto de santería?], y de antemano le digo que he decidido publicar esta carta en internet porque estoy casi segura que [excepto quizás por conducto arzobispal previa autorización de Laura Pollán, la irritable portavoz de las Damas de Blanco, tan susceptible en cuestiones de jerarquía y atribuciones indebidas] de otra manera no le llegaría a sus manos.
Le pido a Dios en mis oraciones diarias lo ilumine en cada paso que dé en [¡¡¡solavaya!!!] bienestar del pueblo de Cuba y que dentro de ese bienestar estén las liberaciones de todos los prisioneros de conciencia y políticos[siempre y cuando, en tanto y en cuanto, sean dialogueros "pacíficos" a ultranza; única y exclusivamente para con el bando gubernamental, sobreentiéndase: a los propios, si se extralimitan como el Chaviano del vídeo frente a la SINA, se les hace entrar en razones a golpe de cabilla envuelta en páginas del Granma] y la unión de todas las familias cubanas, que están separadas precisamente por prohibiciones gubernamentales por causas ideológicas [sin contar la rebatiña por los fulas de remesas y subsidios]. La familia es [además de a menudo una lata y una carga para exiliados y donantes] el núcleo fundamental de la sociedad y merecen abrazarse y amarse [y salta a la vista que estás a la espera del primer guiño biránico para confraternizar cristianamente ante las cámaras de Cubavisión con tu noble General filosemita], es lo más sagrado y sublime que Dios nos regaló, privarlos de ése Derecho es privarle la existencia misma.
Sinceramente [suya],
Lic. Elsa Morejón Hernández Esposa del Dr. Oscar Elías Biscet González, Prisionero de Conciencia en Cuba por Amnistía Internacional. / Email. elsamorejon@yahoo.com / Dirección particular: Avenida de Acosta # 464 Entre 8va y 9na. Lawton, Ciudad de La Habana. Cuba / Teléf. 6991764 Casa 535-276-9405 celular
******************
ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS
Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "CUBA: Elsa Morejón, esposa del Dr. Oscar Elías Bi...":
que comentarios entre corchetes de mas mal gusto! quien se atrevio a hacer esa payasada y es frsutrante que baracutey cubano publique algo asi tan ofensivo, sobre todo para el dr biscet quien es una figura emblematica de la resistencia!
Comentario del bloguista
No veo ese algo tan ofensivo.
No creemos mitos, que después esos mitos pueden volverse contra nosotros.Tal parece que no hemos escarmentado!.
***************
Jorge A. Pomar ha dejado un nuevo comentario en su entrada "CUBA: Elsa Morejón, esposa del Dr. Oscar Elías Bi...":
Gracias, Pedro Pablo. Como de costumbre, le pasé la mano al texto para corregir erratas y añadir algunos comentarios en lila. Si te es factible, te agradecería que lo recargaras. Creo que con esa elocuente carta abierta de Elsa Morejón quedan despejadas las últimas dudas razonables acerca del papel real jugado por el Dr. Biscet en toda esta patraña diversionista urdida alrededor de nuestra disidencia performática de diseño made in Villa Marista. Felizmente, por mucho que todos los interesados se empeñen en mirar hacia otro lado, por fin empieza a venirse abajo como elesperpéntico castillo de arena fina que es. El 2011 promete dar al traste con el resto sin tardanza.
Por cierto, muy pertinente, lúcido e irrefutable tu crudo análisis sobre esa brutal pero evidente "lección del primero de enero" que al cabo de 52 calendarios sigue pendiente de aprendizaje por dos sencillas razones de orden psicosocial: (1) Los corresponsables históricos del evitable ascenso del castrismo se negaron desde el principio entrada a admitir sus fatídicos pecados de juventud. (2) Nuestros cubanólogos no dan pie con bola, entre otros motivos porque en su mayoría prefieren evitarse sinsabores con tal de continuar medrando a costa de la mentira sistemática y consciente.
Por lo demás, Batista no era ni atrás ni alante el "dictador corrupto" que afirma Cepero. He ahí otro cliché inasequible a la profusa documentación disponible en contrario. Aunque no sea ésa la intención del autor, es un sofisma que apenas sirve para atenuar las atrocidades del Biranato. Por simple contraste. Tampoco mandaba matar por ver la sangre correr ni era un estadista intolerante, como prueban mil y una anécdotas de la época. Si alguna razón tuvo Chibás para sus demagógicas catilinarias contra el tándem auténtico Grau-Prío y el simulacro de suicidio radiofónico que le costó su oligárquica existencia, entonces hay que admitir sin más que el cuartelazo incruento del 10 de marzo tampoco fue por puro afán protagónico o delirio de poder.
El final de aquella tragedia nacional inconclusa se lo debemos al gansterismo político incubado en el vientre del Alma Mater y la increíble ineptitud, desaprensión y mala fe de nuestras mal llamadas "clases vivas", que a sabiendas --ignorancia no pueden alegar-- se embromaron a sí mismas de la peor manera posible de la mano de sus fobias ancestrales. El resto hay que apuntárselo a nuestras inveteradas mitomamías historiográficas, que también ha engendrado a todos esos fulastres ególatras de la vieja y nueva sicofancia criolla. Así de sencillo. Dicho lo anterior, coincido en líneas generales con Cepero (¡saludos!), pero sobre todo en lo que atañe a la cacería de brujas en curso contra su amigo Posada Carriles, alevosamente estigmatizado a porfía "en ambas orillas (cutres) de la (fallida) cultura cubana".
Un abrazo,
El Abicú
Jorge A. Pomar ha dejado un nuevo comentario en su entrada "CUBA: Elsa Morejón, esposa del Dr. Oscar Elías Bi...":
Gracias, Pedro Pablo. Como de costumbre, le pasé la mano al texto para corregir erratas y añadir algunos comentarios en lila. Si te es factible, te agradecería que lo recargaras. Creo que con esa elocuente carta abierta de Elsa Morejón quedan despejadas las últimas dudas razonables acerca del papel real jugado por el Dr. Biscet en toda esta patraña diversionista urdida alrededor de nuestra disidencia performática de diseño made in Villa Marista. Felizmente, por mucho que todos los interesados se empeñen en mirar hacia otro lado, por fin empieza a venirse abajo como elesperpéntico castillo de arena fina que es. El 2011 promete dar al traste con el resto sin tardanza.
Por cierto, muy pertinente, lúcido e irrefutable tu crudo análisis sobre esa brutal pero evidente "lección del primero de enero" que al cabo de 52 calendarios sigue pendiente de aprendizaje por dos sencillas razones de orden psicosocial: (1) Los corresponsables históricos del evitable ascenso del castrismo se negaron desde el principio entrada a admitir sus fatídicos pecados de juventud. (2) Nuestros cubanólogos no dan pie con bola, entre otros motivos porque en su mayoría prefieren evitarse sinsabores con tal de continuar medrando a costa de la mentira sistemática y consciente.
Por lo demás, Batista no era ni atrás ni alante el "dictador corrupto" que afirma Cepero. He ahí otro cliché inasequible a la profusa documentación disponible en contrario. Aunque no sea ésa la intención del autor, es un sofisma que apenas sirve para atenuar las atrocidades del Biranato. Por simple contraste. Tampoco mandaba matar por ver la sangre correr ni era un estadista intolerante, como prueban mil y una anécdotas de la época. Si alguna razón tuvo Chibás para sus demagógicas catilinarias contra el tándem auténtico Grau-Prío y el simulacro de suicidio radiofónico que le costó su oligárquica existencia, entonces hay que admitir sin más que el cuartelazo incruento del 10 de marzo tampoco fue por puro afán protagónico o delirio de poder.
El final de aquella tragedia nacional inconclusa se lo debemos al gansterismo político incubado en el vientre del Alma Mater y la increíble ineptitud, desaprensión y mala fe de nuestras mal llamadas "clases vivas", que a sabiendas --ignorancia no pueden alegar-- se embromaron a sí mismas de la peor manera posible de la mano de sus fobias ancestrales. El resto hay que apuntárselo a nuestras inveteradas mitomamías historiográficas, que también ha engendrado a todos esos fulastres ególatras de la vieja y nueva sicofancia criolla. Así de sencillo. Dicho lo anterior, coincido en líneas generales con Cepero (¡saludos!), pero sobre todo en lo que atañe a la cacería de brujas en curso contra su amigo Posada Carriles, alevosamente estigmatizado a porfía "en ambas orillas (cutres) de la (fallida) cultura cubana".
Un abrazo,
El Abicú
**************
Comentario del Bloguista
Saludos Jorge; hoy bien entrada la noche haré tus correcciones y añadiduras.Ahora tengo que hacer algunas diligencias. Feliz Año 2011 !
Una anécdota muy elocuente es la del antibatistiano arquitecto Nicolás Quintana y Fulgencio Batista en un club de la playa de Varadero siendo Quintana, Jefe de Proyectos del Proyecto Turístico de Varadero. Si no me equivoco esa anécdota está en la revista Encuentro de la Cultura Cubana No. 18. Si tengo tiempo más tarde, la copio y pego.
¨El Gran Burgués¨
(Fragmento)
n.q.: Vamos a empezar con mi padre. Según me contaban, el viejo y Miguel Ángel eran los arquitectos del Presidente Zayas y ellos iban a jugar dominó a su finca algunos fines de semana. A la entrada siempre estaba un cabo que abría el portón, muy diligente. Papá fumaba unos tabacos enormes y carísimos y le regalaba siempre algunos, porque simpatizaba con aquella persona. Era Fulgencio Batista.
Con el paso de los años Batista es Presidente y una noche estamos comiendo en el Club Kawama y Batista entró con un grupo. El viejo y Miguel Ángel se levantan en señal de respeto y más tarde los llaman a la mesa de Batista. Entonces papá me dice: «Ven para que aprendas cómo se manejan estas cosas.» Así fue como conocí a Fulgencio Batista y Zaldívar. Años después empiezo a trabajar en la jnp, con el arquitecto José Luis Sert como consultor, en el Plan Piloto de Varadero. Una noche que habíamos bebido mucho vino, él empezó a cantar la Tercera Internacional caminando por la playa, acuérdate de que él era un republicano español. Lo paré a tiempo. José Luis era un tipo formidable y un buen amigo.
El Centro Turístico de Varadero era el sitio donde estábamos laborando. Se hicieron muchas obras: se dragó la Laguna de Paso Malo, se construyeron los muelles y un montón de obras más. Habíamos codificado la altura de los pinos existentes como la mayor altura a la que se podía construir y tomamos una serie de decisiones ambientales para proteger Varadero. Hoy día Varadero está totalmente «cancunizado», fuera de escala los edificios con el sitio natural. Han cometido una barbaridad imperdonable. Un crimen ambiental.
Recuerdo que una vez Batista me dijo: «Nicolás, yo he inaugurado varias obras en Varadero y siempre hay un asiento vacío en la tribuna que se supone es el asiento tuyo, de Nicolás Quintana y Gómez, Jefe del Plan. Nunca te veo en las inauguraciones ¿por qué?» Le respondí: «Es que yo no soy batistiano, Presidente.» ¿Cuál es la diferencia entre el Innombrable y Fulgencio Batista y Zaldívar? Que a mí no me pasó entonces absolutamente nada. Cuando se levantó me puso la mano en el hombro y me dijo: «Tengo entendido que eres un gran arquitecto».
Durante el verano yo siempre alquilaba en Varadero una casa cerca de la playa. Batista alquilaba la casa de Gómez Wallington frente a la playa. A veces él venía, y me preguntaba cómo iba el Plan. Así hubo varias reuniones ocasionales y Batista te daba el chance de medirlo. Cuando el Innombrable se robó el país, engañando al pueblo de Cuba según confesión propia, todo eso se alteró, uno no podía comunicarse con el individuo. Esa relación humana no se perdía con Batista, a pesar de todos sus defectos evidentes de típico dictador latinoamericano. No te puedo decir que odiaba a Fulgencio Batista y Zaldívar. No me interesa odiar, no hay nada creativo en eso. En cuanto al Innombrable… Camus decía que: «No hay destino que no se venza con el desprecio».
Los ministros de Batista eran gente de primera categoría. Dos ejemplos: Juan J. Remos, Ministro de Educación, y el arquitecto Nicolás Arroyo, Ministro de Obras Públicas. Había gente criminal en los cuerpos represivos, en los militares, y en la policía. Batista fue cómplice al permitirlo, eso es obvio, y fue lo que lo hundió; aparte de la irracionalidad del golpe militar del 10 de Marzo de 1952, que hundió a Cuba. Por cierto, Batista nunca fue mi jefe cuando yo dirigía los Planes en la jnp. Los jefes de Planes reportábamos a los Miembros de la Junta, que eran cinco. Su Presidente era el arquitecto Nicolás Arroyo. Batista no participaba ni influía en la toma de decisiones.
Pag 28-29
***************
Comentario del Bloguista
Saludos Jorge; hoy bien entrada la noche haré tus correcciones y añadiduras.Ahora tengo que hacer algunas diligencias. Feliz Año 2011 !
Una anécdota muy elocuente es la del antibatistiano arquitecto Nicolás Quintana y Fulgencio Batista en un club de la playa de Varadero siendo Quintana, Jefe de Proyectos del Proyecto Turístico de Varadero. Si no me equivoco esa anécdota está en la revista Encuentro de la Cultura Cubana No. 18. Si tengo tiempo más tarde, la copio y pego.
¨El Gran Burgués¨
(Fragmento)
n.q.: Vamos a empezar con mi padre. Según me contaban, el viejo y Miguel Ángel eran los arquitectos del Presidente Zayas y ellos iban a jugar dominó a su finca algunos fines de semana. A la entrada siempre estaba un cabo que abría el portón, muy diligente. Papá fumaba unos tabacos enormes y carísimos y le regalaba siempre algunos, porque simpatizaba con aquella persona. Era Fulgencio Batista.
Con el paso de los años Batista es Presidente y una noche estamos comiendo en el Club Kawama y Batista entró con un grupo. El viejo y Miguel Ángel se levantan en señal de respeto y más tarde los llaman a la mesa de Batista. Entonces papá me dice: «Ven para que aprendas cómo se manejan estas cosas.» Así fue como conocí a Fulgencio Batista y Zaldívar. Años después empiezo a trabajar en la jnp, con el arquitecto José Luis Sert como consultor, en el Plan Piloto de Varadero. Una noche que habíamos bebido mucho vino, él empezó a cantar la Tercera Internacional caminando por la playa, acuérdate de que él era un republicano español. Lo paré a tiempo. José Luis era un tipo formidable y un buen amigo.
El Centro Turístico de Varadero era el sitio donde estábamos laborando. Se hicieron muchas obras: se dragó la Laguna de Paso Malo, se construyeron los muelles y un montón de obras más. Habíamos codificado la altura de los pinos existentes como la mayor altura a la que se podía construir y tomamos una serie de decisiones ambientales para proteger Varadero. Hoy día Varadero está totalmente «cancunizado», fuera de escala los edificios con el sitio natural. Han cometido una barbaridad imperdonable. Un crimen ambiental.
Recuerdo que una vez Batista me dijo: «Nicolás, yo he inaugurado varias obras en Varadero y siempre hay un asiento vacío en la tribuna que se supone es el asiento tuyo, de Nicolás Quintana y Gómez, Jefe del Plan. Nunca te veo en las inauguraciones ¿por qué?» Le respondí: «Es que yo no soy batistiano, Presidente.» ¿Cuál es la diferencia entre el Innombrable y Fulgencio Batista y Zaldívar? Que a mí no me pasó entonces absolutamente nada. Cuando se levantó me puso la mano en el hombro y me dijo: «Tengo entendido que eres un gran arquitecto».
Durante el verano yo siempre alquilaba en Varadero una casa cerca de la playa. Batista alquilaba la casa de Gómez Wallington frente a la playa. A veces él venía, y me preguntaba cómo iba el Plan. Así hubo varias reuniones ocasionales y Batista te daba el chance de medirlo. Cuando el Innombrable se robó el país, engañando al pueblo de Cuba según confesión propia, todo eso se alteró, uno no podía comunicarse con el individuo. Esa relación humana no se perdía con Batista, a pesar de todos sus defectos evidentes de típico dictador latinoamericano. No te puedo decir que odiaba a Fulgencio Batista y Zaldívar. No me interesa odiar, no hay nada creativo en eso. En cuanto al Innombrable… Camus decía que: «No hay destino que no se venza con el desprecio».
Los ministros de Batista eran gente de primera categoría. Dos ejemplos: Juan J. Remos, Ministro de Educación, y el arquitecto Nicolás Arroyo, Ministro de Obras Públicas. Había gente criminal en los cuerpos represivos, en los militares, y en la policía. Batista fue cómplice al permitirlo, eso es obvio, y fue lo que lo hundió; aparte de la irracionalidad del golpe militar del 10 de Marzo de 1952, que hundió a Cuba. Por cierto, Batista nunca fue mi jefe cuando yo dirigía los Planes en la jnp. Los jefes de Planes reportábamos a los Miembros de la Junta, que eran cinco. Su Presidente era el arquitecto Nicolás Arroyo. Batista no participaba ni influía en la toma de decisiones.
Pag 28-29
***************
3 Comments:
Por cierto, muy pertinente, lúcido e irrefutable tu crudo análisis sobre esa brutal pero evidente "lección del primero de enero" que al cabo de 52 calendarios sigue pendiente de aprendizaje por dos sencillas razones de orden psicosocial: (1) Los corresponsables históricos del evitable ascenso del castrismo se negaron desde el principio entrada a admitir sus fatídicos pecados de juventud. (2) Nuestros cubanólogos no dan pie con bola, entre otros motivos porque en su mayoría prefieren evitarse sinsabores con tal de continuar medrando a costa de la mentira sistemática y consciente.
Por lo demás, Batista no era ni atrás ni alante el "dictador corrupto" que afirma Cepero. He ahí otro cliché inasequible a la profusa documentación disponible en contrario. Aunque no sea ésa la intención del autor, es un sofisma que apenas sirve para atenuar las atrocidades del Biranato. Por simple contraste. Tampoco mandaba matar por ver la sangre correr ni era un estadista intolerante, como prueban mil y una anécdotas de la época. Si alguna razón tuvo Chibás para sus demagógicas catilinarias contra el tándem auténtico Grau-Prío y el simulacro de suicidio radiofónico que le costó su oligárquica existencia, entonces hay que admitir sin más que el cuartelazo incruento del 10 de marzo tampoco fue por puro afán protagónico o delirio de poder.
El final de aquella tragedia nacional inconclusa se lo debemos al gansterismo político incubado en el vientre del Alma Mater y la increíble ineptitud, desaprensión y mala fe de nuestras mal llamadas "clases vivas", que a sabiendas --ignorancia no pueden alegar-- se embromaron a sí mismas de la peor manera posible de la mano de sus fobias ancestrales. El resto hay que apuntárselo a nuestras inveteradas mitomamías historiográficas, que también ha engendrado a todos esos fulastres ególatras de la vieja y nueva sicofancia criolla. Así de sencillo. Dicho lo anterior, coincido en líneas generales con Cepero (¡saludos!), pero sobre todo en lo que atañe a la cacería de brujas en curso contra su amigo Posada Carriles, alevosamente estigmatizado a porfía "en ambas orillas (cutres) de la (fallida) cultura cubana".
Un abrazo,
El Abicú
Le ronca el mango caballeros.Asi no se mata a un tirano,se le da vida!!!