CHÁVEZ, CUBA E IRÁN
Angélica Mora
Nueva York
Apuntes de una periodista
Hugo Chávez tuvo materias tan urgentes de tratar que saltó sorpresivamente a su avión y voló a Cuba.
Debe de haber sido una consulta muy especial con el regimen de la Habana. Tan confidencial que no pudo tratarse a través del teléfono, por temor a que escucharan oídos indiscretos.
El viaje del Aprendiz de Dictador desbarató todo el protocolo de la ceremonia para recibir al presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, quien llegó a Venezuela la noche del martes para una visita de estado que estaba anunciada con semanas de antelación.
Como correspondía al protocolo, era el Jefe de Estado quien debía recibir a su homólogo. El canciller venezolano, quien tampoco está Maduro para el cargo, Nicolás Maduro, fue quien manejó los asuntos de ordenar que la alfombra "roja-rojita" fuera extendida a los pies del visitante.
El Vice-Presidente Ejecutivo, Ramón Carrizalez Rengifo, segundo en el rango diplomático, tampoco acudió a la cita.
Sin embargo, las materias urgentes e instrucciones que Chávez puso a la consideración de los presentes en el aquelarre cubano fueron lo suficiente serias como para pasar por alto la Diplomacia de Estado en Venezuela, que -total- nunca ha sido el fuerte del Mandamás de Miraflores.
Ya instalado de vuelta en su sillón Presidencial, "El Discípulo del Diablo", muy afónico, explicó a media voz que su ausencia en la ceremonia de bienvenida a su pana de Irán se debió a que se encontraba en Cuba, en una "visita relámpago de 7 horas con Fidel y Raúl Castro".
Que Chávez fue para escuchar se desprende de una nueva metida de pata de su parte al salírsele que en el encuentro con "los Castro" no había hablado casi nada:
"Yo hablé no creo que ni media hora". ((¿Y quien habló en las otras 6 horas y media?))
"Yo tuve un viaje relámpago a Cuba, pasé siete horas ayer con Fidel, revisando distintos temas, lo hacemos con bastante frecuencia...luego me reuní con Raúl... llegamos de madrugada...
(dirigiéndose a Ahmadinejad)..."Me encomendaron que te diera un abrazo...me dijo Fidel: ‘Dile a Ahmadinejad que llegar a Venezuela es como llegar a Cuba, porque ésta es la misma patria', así que te doy la bienvenida a Cuba también, hermano..."
Como mencionan algunos medios venezolanos, que aún tratan de informar pese a la censura, uno de los puntos que no está en la agenda Chávez-Mahmoud es el abismal desbalance comercial entre Irán y Venezuela, 7-1 a favor de Teherán.
Ya repuesto "El Discípulo del Diablo" de su viaje relámpago de consulta y su problema de garganta --que el visitante entendió muy bien, porque lo del viaje a Cuba estaba acordado de antemano entre ellos-- se lanzó de lleno a expresar en varias reuniones con la prensa internacional, su amor eterno por su "pana" y socio en Uranio del Bueno.
El iraní le correspondíó emocionado declarándolo “hermano” y asegurando que “así será hasta el final”. (No dijo cuándo sería “el final”).
Lo que sí quedó en claro -y el Dúo lo seguirá repitiendo durante las declaraciones a la prensa en éste y otros encuentros- es que son "Uno solo" en la lucha contra el Odiado Imperio.
