Buscar este blog

sábado, 18 de mayo de 2013

Extraño corazón.MURIO AREPENTIDO DE "FUSILAR TRAIDORES" JUNTO CON EL ASESINO JUAN ALMEIDA




 LA HABANA, Cuba, 17 de mayo de 2013,
 Odelín Alfonso Torna/ www.cubanet.org
.-
 El pasado jueves 2 de mayo murió Raimundo Enrique Ginarte, conocido en el círculo familiar como Dudú, uno de los auditores del Segundo Frente del Ejército Rebelde. Actuando en contra de su voluntad y la de su hijo, residente en el exterior desde el 2012, la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC) decidió incinerar sus restos y depositarlo en el monumento al Segundo Frente, en el oriente cubano. Tuve la oportunidad de entrevistar a Raimundo en mayo de 2009, uno de los responsables de la escolta de Fidel Castro en los primeros años de la revolución, junto a Pedro Luis Díaz Lanz, en la antigua madriguera del dictador, en la barriada habanera de Cojímar. Olvidado por la ACRC, pero incondicional a la revolución cubana, Dudú contestó con animadversión todas las preguntas formuladas. Ante la solicitud del desaparecido comandante Juan Almeida Bosque, Dudú desestimó dirigir un regimiento en Oriente, también eludió el cargo de jefe de personal en el antiguo centro de reclusión y ejecución, conocido como “La Cabaña”, donde el “héroe” mundial Ernesto Che Guevara ordenó los fusilamientos. “Pude tener una buena casa y no la quise. Hoy fuera Coronel o General, pero preferí trabajar 30 años en la Aduana de La Habana”, dijo en aquel entonces mostrándo las medallas 50 Aniversario del Ejército Rebelde y la de los 25 años como trabajador de la Aduana General de la República, además de una carta de reconocimiento entregada por el entonces General de Ejército Raúl Castro, en 1963, por sus servicios en Argelia. En este país africano estuvo bajo las órdenes del entonces capitán Ulises Rosales del Toro, el teniente Rigoberto Montañés y el fiscal “Papito” Serguera. Vivió el golpe de estado protagonizado por el ministro de defensa argelino Houari Boumedienne (en 1965), contra el presidente Ahmed Ben Bella, también la deshonra de Serguera, amonestado por la dirección de la Revolución por emitir un informe distorsionado sobre la situación en Argelia. Entre 1957 y 1958, Raimundo fungió como auditor junto a la heroína revolucionaria Melba Hernández, en la Columna III (Mario Muñoz Monroy), dirigida por Juan Almeida. De esta etapa guardó los más tristes recuerdos, por sentirse parte de las ejecuciones practicadas a los soldados traidores o ladrones del Ejército Rebelde. “Cuando se iba a fusilar a un chivato, culpable de la muerte de tres o cuatro revolucionarios, no se le celebraba juicio… Almeida y yo lo ajusticiábamos”, me dijo un tanto arrepentido, pero nunca eximiéndose de culpa. Raimundo pasaba horas subrayando qué pudo o no hacer, qué perdió o ganó al ser un miliciano honrado y modesto, mientras la rapiña del Ejército Rebelde se repartía el botín en los primeros años de la revolución. Después de su retiro, la ACRC lo premió con un bono de cincuenta pesos mensuales para que se mal alimentara en un comedor comunitario, más 200 pesos (8 dólares) por el “deber cumplido”. A su lecho de muerte se llevó secretos, su obstinada austeridad y las penurias que tuvo que vivir en su casa de la calle Venus 609, entre Soledad y Castañedo, en el municipio habanero de Guanabacoa. Por más de veinte años, recibió una pensión de 300 pesos en moneda nacional. Todo su capital hacía algo menos de 25 dólares mensuales. Su esposa emigró a los Estados Unidos antes de la caída del Muro de Berlín y él tuvo que lidiar, junto a su hijo, Ulises Ginarte Caicedo, los peores momentos del “período especial”. Las carestías de Dudú fueron suplidas con remesas que su hijo recibía del exterior, y de las que él no tenía conocimiento. Al conocerse de su muerte, la ACRC se acordó de que existía un combatiente en la calle Venus. Pero fue solo para “rendir honores” –sin autorizo de los familiares- en el crematorio del cementerio de Guanabacoa, y darle de baja a los estipendios por el “deber cumplido”; también del comedor comunitario para jubilados sin amparo familiar.

 odelinalfonso@yahoo.com

No hay comentarios:

Entrada destacada

EL MUSEO DEL HORROR EN LA HABANA

  POR LA REVOLUCION DEMOCRATICA EN CUBA EL MUSEO DEL HORROR EN LA HABANA  Empotradas sus cenizas dentro de una gris piedra con forma de boni...