AYUDEMOS A PANFILO ¿COMO? DEJÁNDOLO EN PAZ

2009-11-18

Por José L. Martel.
Miami, Florida, USA.
Como me llega y después de leer su contenido, haber visto parte del programa de Haza con sus invitados Patterson, Ichikawa y el médico cubano recien llegado conjuntamente con las escenas mostradas de Pánfilo quiero dar mi opinión sobre este asunto. Desde aquí le estamos haciendo daño a ese pobre hombre totalmente alcohólico dentro de Cuba.

Creo que a Pánfilo el exilio debe de dejarlo tranquilo y dejar de hacer publicidad x rating. Pánfilo es un alcohólico empedernido y saturado del alcohol "pelón" hasta el tuétano, su cerebro esta debilitado no solo por la falta de alimentos sino por el "mofuco", "walfarina", "chispa de tren" y me imagino que este hombre hasta " luz brillante" debe de beber. Y repito " le estamos haciendo un daño terrible a ese desvalido y sin discusión una persona alcohólíca dentro de Cuba".

Ayer Oscar Haza se reía y mofaba de ese cubano como si estuviese viendo a un payaso actuando dentro de un circo de Pueblo Mocho. No por favor ese hombre le dijo a Raúl que era un m..... (afeminado) y a Fidel otro tanto. Y él sigue con el hambre, la desesperación combinada con frustación sin salida. Porque realmente la está pasando muy mal y busca su consuelo en el alcohol, medicina que no le puede falta y lo mata a la vez.

Yo por mi parte no estoy de acuerdo con seguir mostrando a un cubano en esa facha y escenario ya que resulta denigrante. Seguir proyectando a un Pánfilo hambriento y borracho concetudinario es criminal. Es un cubano como nosotros aqui e igual a los de allá que solo esta atravesando y sufriendo las desgracias de la degeneración impuesta por el castrismo.
Hablemos de los sitiados en la casa de Vladimiro Roca, de la salud de Martha Beatriz y averiguar sobre que le estan haciendo a Oscar Elias Biscet y otros presos de conciencia que se pudren en esas cárceles inmundas. Seguir hablando de Yoani Sánchez para que nada le pase pero dejar tranquilo a Pánfilo que como se comentö "gracias a la publicidad de Miami lo condenaron la primera vez". ¿Qué sucederá esta vez si seguimos utilizando a ese pobre borracho como bandera? Creo que eso no es valentía de lucha y lo que se puede apreciar que su vida esta en peligro dentro de la isla.

Cada cual que haga su opinión y modo de pensar las coas. Personalmente no le hago el juego a esos productores y presentadores de la television que quieren ganar rating con la desgracia del pueblo cubano y mas todavia con la desaparición y muerte futura de un ser ya desgraciado y alcoholíco como Pántifo. Si queremos ayudar a Pánfilo vamos a enviarle medicinas y los medos necesarios para que médicos independientes en Cuba lo atienda y quien sabe lo curen, pero vamos a dejar a Pánfilo en paz.



Lic. José L. Martel
Periodista
Premio "José María Heredia" - INPL 2007



Otra vez Pánfilo



Ana Dolores García

Primero fue aquella aparición que pudo creerse «espontánea» ante una cámara de vídeo callejera. Tal vez ni siquiera fue tan «espontánea» o, si realmente lo fue, quienes filmaron no pusieron en duda el echarla a rodar por el mundo. Alguien la envió a Youtube y, en efecto, fue vista y revista por medio millón de personas. Pánfilo se hizo famoso. De pobre guiñapo humano consumido por el alcohol y la frustración había pasado a ser todo un personaje. Se había convertido en vocero lúcido de un clamor popular que se calla cuando se está sobrio.

No demoró Pánfilo en sentir las consecuencias de ese clamor por «jama» y se apresuró a suavizarlas. Esta vez no hablaba el borracho sino el hombre sensato que reconocía haber sido utilizado. Y que estaba en «la candela» porque sabía lo que le venía encima. Un nuevo vídeo volvió a circular por Internet con su imagen serena que trataba de desfacer entuertos para salvar su propio pellejo. Pero no le valió de mucho: fue detenido, enjuiciado y condenado a dos años de prisión por «peligrosidad predelictiva». No valió, naturalmente, la supuesta apelación reglamentaria. Comenzó entonces en Internet la campaña mediática de algunas organizaciones del exilio contra la injusticia de la justicia revolucionaria y por la eliminación de su condena. Tuvo éxito porque estos hechos coincidieron con el titulado Concierto por la Paz de Juanes en La Habana y Castro II ensayó un gesto generoso. Sacaron a Pánfilo de la cárcel y lo enviaron a un centro siquiátrico para curar su adicción alcohólica. Ahora vemos que no pudieron hacer mucho en tan corto tiempo.

Pánfilo volvió a su vida normal, supuestamente curado y seguramente amonestado. Mas el morbo debía continuar. Y gente sin escrúpulos, de esas que viajan a Cuba en plan de diversión, buscaron a Pánfilo. Lo encontraron fácilmente. ¿Estaba borracho ya o lo emborracharon ellos? En un bar semioscuro que bien protegía la identidad de los viajeros, lo animaron a hablar. Pánfilo, ya sin control, rebasó los límites de su primer discurso sobre «jama» y se volcó en frases soeces. Los improvisados entrevistadores salieron de Cuba y Pánfilo quedó allá con la resaca, el bochorno de haberse dejado llevar por manipuladores y las nuevas consecuencias.

Pero ese bochorno es nada comparado con el que debieran sentir quienes provocaron sus etílicas palabras con el doble propósito de burla y lucro. Un vídeo que dice muy poco de la calidad humana de quienes lo idearon y de quienes lo airean en la televisión, porque es un modo segurísimo de subir puntos en las encuestas de audiencia. Bochorno, grande también, deben sentir los titulados filósofos panelistas que se prestaron a comentar tan ligera y sarcásticamente al Pánfilo que, fuera de sí, les estaba sirviendo para sus distorsionadas babosadas.

El lucro y el morbo dados de la mano. A más morbo, más audiencia. Y a más audiencia más lucro. Ya lo advertía Lope de Vega en el siglo XVI: «El vulgo es necio, y pues lo paga es justo, hablarle en necio para darle gusto».

Ana Dolores García
http://lagacetadepuertoprincipe.blogspot.com/